Proyectos Estratégicos del INIA
Descripción del proyecto
Las tendencias de recuperación de la socio-economía agrícola en Venezuela son evidentes. Existen programas generados en el espíritu de las leyes revolucionarias, que permiten reconocer logros como: un mayor acceso a la tierra, a los alimentos, al crédito, a la capacitación para la producción, el crecimiento sostenido del sistema cooperativo, el incremento de la superficie bajo siembra, mayor participación del sector pesquero artesanal, y un estado de conciencia ambiental que nos coloca en la vanguardia Latinoamericana sobre el tema, entre otros aspectos. Sin embargo, algunos aspectos se mantienen con la etiqueta de alto riesgo, particularmente lo relativo a la producción y suplencia de insumos estratégicos para la producción, como es la semilla. Si bien la sociedad percibe como muy relevante el incremento de la superficie de siembra y las expectativas de incremento en la producción agrícola en el mediano plazo, también observa con preocupación la materialización de la Soberanía Agroalimentaria con relación al autoabastecimiento en relación a la producción de semilla de los rubros que conforman la cesta básica de los venezolanos entre los que se pueden mencionar: arroz, maíz, papa, caraota, frijol, hortalizas, ocumo, ñame, sorgo, frutales entre otros. Con el objeto de darle un buen uso y manejo eficiente de los recursos de las comunidades agrícolas, bajo los principios de apropiación de poder y equidad de género; se desarrollarán e innovarán tecnologías agrícolas sustentables, con la participación de las comunidades rurales, indígenas y urbanas. Ello permitirá contribuir con un desarrollo endógeno, con una nueva visión del relacionamiento científico-tecnológico con miras a fortalecer la soberanía y seguridad alimentaria, lo cual implica la disminución del uso de agroquímicos, de tecnologías de alto insumo, con el consecuente aumento de la calidad de vida de estas comunidades y de los consumidores finales de alimentos.
Por otro lado, la agricultura venezolana ha tenido como orientación fundamental de desarrollo, la incorporación de tecnologías de alto uso de insumos mediante la introducción de paquetes tecnológicos muchos no adaptados a las condiciones agroecológicas ni a la cultura ancestral o tradicional de los productores del agro, con la consecuente necesidad de uso de servicios especializados. Lo anterior ha provocado la sustitución de germoplasmas autóctonos por la siembra de variedades e híbridos que han requerido de la aplicación excesiva de insumos químicos (herbicidas, fungicidas, nematicidas, insecticidas, fertilizantes), con la finalidad de mantener el control sobre los ataques de insectos, enfermedades además de aumentar el rendimiento de los cultivos. No obstante, el uso excesivo de éstos, ha causado daños irreversibles al ambiente, a la salud pública y resistencia de las plagas, incrementando otros daños más difíciles de controlar. Así mismo, fue causa de la extinción de organismos benéficos que naturalmente controlan las poblaciones de insectos y microorganismos en ambientes poco intervenidos, afectando la biodiversidad de estos agroecosistemas.
Para remediar esta situación se necesitara del desarrollo e innovación de Referenciales ecotecnológicos sobre uso de las buenas prácticas agrícolas sustentables de los sistemas agroproductivos, desarrollo de protocolos sobre procesos tecnológicos de producción de biocontroladores, biofertilizantes, producción y aplicación de abonos orgánicos mixtos y enmiendas para las diferentes zonas agroecológicas, frutales, raíces / tubérculos y animales mejorados por técnicas biotecnológicas, contar con colecciones fortalecidas y conservadas de artrópodos, microorganismos, suelos y germoplasma vegetal con potencialidades de uso, desarrollo de prototipos de maquinarias e instrumentos científicos, sistemas de información para la predicción de plagas y/o monitoreo fenológico de cultivos en diferentes zonas agroecológicas; así como programas de educación, promoción e intercambio de saberes en el uso de tecnologías sustentables para comunidades rurales, indígenas y urbanas e instituciones educativas; además fortalecer la red de servicios del INIA; contar con una normativa INIA sobre el uso seguro de la biotecnología y conformar dos centros nacionales de tecnología agrícola.Objetivos:
Desarrollar tecnologías agrícolas tropicales para impulsar un modelo de gestión de uso y manejo eficiente de los recursos productivos, con la participación y organización de las comunidades rurales, bajo los principios del modelo agrario socialista.Objetivos Específicos:
Desarrollar, validar y socializar tecnologías alternativas y etnotecnologías a fin de ampliar el nivel de aprovechamiento de los recursos genéticos con énfasis en los autóctonos existentes en los agroecosistemas venezolanos, incluyendo la conservación y valoración de la biodiversidad.
Generar referenciales ecotecnológicos y su aplicación en el mejoramiento de las prácticas agrícolas sustentables para:
La optimización de procesos de los sistemas pre y postcosecha
La producción de bioinsumos y enmiendas.
El manejo de plagas y suelos.
Desarrollar prototipos de maquinarias e instrumentos científicos.
Fortalecer la red nacional de servicios para el análisis o diagnóstico de plagas-enfermedades, suelo-planta-agua-fertilizante y enmienda del INIA incluyendo el desarrollo de sistemas nacionales de información y de monitoreo participativo.
Consolidar tres nuevos centros nacionales de ecotecnología agrícola: biotecnología, bioinsumos y mecanización agrícola.
Establecer programas de formación integral, promoción e intercambio de saberes en el uso de ecotecnologías sustentables en comunidades rurales, urbanas, indígenas e instituciones educativas.Impactos Previstos:
Al finalizar el presente proyecto se habrá incentivado en 10% la generación y uso de herramientas biotecnológicas en apoyo al desarrollo socio productivo agrícola y endógeno. Habrá una oferta de materiales genéticos vegetales y animales adaptados a las condiciones agroecológicas para la producción endógena a través del desarrollo de XX programas integrados de mejoramiento asistido, plantas y animales de calidad genética y sanitaria. Con lo anterior se favorecerá el desarrollo endógeno de las comunidades rurales, indígenas y urbanas con la consecuente disminución de la dependencia científico-tecnológica y alimentaria, disminución del uso de agrotóxicos y tecnologías de alto insumo y, aumento de la calidad de vida de estas comunidades y de los consumidores finales de alimentos. Beneficiarios Y Beneficios:
100.000 productores agrícolas atendidos en el manejo sustentable de los sistemas de producción agrícola prioritarios venezolanos.
200 técnicos innovadores y comunicadores rurales con formación en uso de tecnologías agrosustentables.
600 productores atendidos en formación de uso de bioinsumos dentro de un sistema de manejo sustentable agrícola.
5.000 estudiantes atendidos en cuanto a desarrollo y uso de tecnologías sustentables.
Organismos competentes en el área de Bioseguridad (MPPAMB, MPPAT, MPPSDS, MPPCT, MPPE, MMPES) con información para desarrollar políticas y estrategias de Seguridad en el uso de la Biotecnología.